El apellido Selassie es de origen etíope y se encuentra más comúnmente en países con conexiones con Etiopía y el rastafarianismo. El nombre Selassie a menudo se asocia con el emperador Haile Selassie, quien gobernó Etiopía de 1930 a 1974 y los rastafaris lo consideran una figura divina. Esta asociación ha llevado al uso generalizado del apellido Selassie entre los seguidores del movimiento rastafari.
El nombre Selassie es de origen amárico, uno de los idiomas que se hablan en Etiopía. Se deriva de la palabra Ge'ez "sälaśē", que significa "trinidad" o "divina". El nombre Selassie se utiliza a menudo como título de respeto hacia alguien considerado de importancia divina, como el emperador Haile Selassie.
El apellido Selassie se encuentra más comúnmente en Etiopía, donde es un nombre muy conocido y respetado. También se encuentra en países con importantes poblaciones etíopes o conexiones con el rastafarianismo, como Ghana, Estados Unidos, Inglaterra y Canadá.
Según los datos, el apellido Selassie tiene la mayor incidencia en Etiopía, con más de 9.952 personas que llevan el nombre. También es relativamente común en Ghana, con 3.135 casos del apellido. En los Estados Unidos, hay 394 personas con el apellido Selassie, y en Inglaterra, hay 55. El apellido es menos común en otros países, con un número menor de personas que llevan el nombre.
En países como Grecia, Bermudas, Suecia y Sudáfrica, el apellido Selassie se encuentra en menor número, pero aún mantiene una presencia. En países como Dinamarca, Emiratos Árabes Unidos, Nigeria y Noruega, hay aún menos personas con el apellido Selassie.
El apellido Selassie tiene una importante importancia cultural e histórica, particularmente en el contexto de la historia etíope y el rastafarianismo. Es un nombre estrechamente asociado con el emperador Haile Selassie y el movimiento rastafari, que lo ve como una figura divina y el Mesías. Como resultado, el apellido Selassie se utiliza a menudo como símbolo de fe y reverencia entre los seguidores del rastafarianismo.
Si bien el apellido Selassie es la variación más común del nombre, existen otras variaciones que se pueden encontrar en diferentes regiones e idiomas. En amárico, el nombre puede escribirse como "ሥላሴ" o "Sälaśē", mientras que en otros idiomas puede escribirse como "Selasie" o "Selase". Estas variaciones reflejan las diversas tradiciones lingüísticas y transliteraciones del nombre Selassie.
En conclusión, el apellido Selassie es un nombre de origen etíope que tiene una importante importancia cultural e histórica, particularmente en el contexto de la historia etíope y el rastafarianismo. Es un nombre que está estrechamente asociado con el emperador Haile Selassie y el movimiento rastafari, y se utiliza como símbolo de fe y reverencia entre los seguidores del rastafarianismo.
Uno de los efectos de la globalización ha sido que los apellidos se dispersen mucho más lejos de las fronteras de su país, de manera que podemos hallar apellidos americanos en Europa o apellidos americanos en Oceanía. De esta misma forma ocurre en el caso de Selassie, que como puedes comprobar, podemos afirmar que es un apellido representado orgullosamente en casi todos los países del mundo. Aún así hay países en los cuales de forma clara el número de personas que llevan el apellido Selassie es mayor a la los otros países.
La oportunidad de informarse en un mapa en relación a qué países detentan un mayor número de Selassie en el mundo, nos ayuda mucho. Poniéndonos encima del mapa, encima de un país específico, podemos ver la cifra exacta de personas que llevan el apellido Selassie, para lograr de esta forma los datos concretos de todos los Selassie que es posible encontrar a día de hoy en ese país. Todo esto nos ayuda también a hacernos una idea no solo de dónde es originario el apellido Selassie, sino también de en qué forma se han desplazado y han migrado las gentes cuyas raíces forman parte de la familia con el apellido Selassie. De la misma manera, es posible ver en qué países se han asentado y progresado, por lo que si Selassie es nuestro apellido, parece llamativo conocer a qué otros lugares del mundo es posible que se desplazara un día un antepasado nuestro.